top of page
  • Moisés Quiroz

El cine, ventana al mundo, vena a la vida: Yann Arthus-Bertrand en el festival Cinema Planeta

Por: Moisés Quiroz*


Desde la primavera del 2009, el Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente de México “Cinema Planeta” se ha consolidado como el festival de cine ambientalista más importante de América Latina, exhibiendo tanto películas nacionales como extranjeras. Hace algunos años la agrupación que lo organiza comenzó a desarrollar la plataforma Idea Planeta, que ahora se estrena para brindar acceso remoto a la selección que compone esta fiesta cinematográfica. Así como muchas especies luchan por adaptarse, el Festival inaugura este año su estrategia de cine en línea para poder celebrar al planeta desde nuestras pantallas.


En febrero de este año, Rajendra Pachauri, quien fuera presidente de 2000 a 2015 del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático y una de las voces más importantes en la lucha por controlar el cambio climático, transcendió de este mundo. Por este motivo, la actual edición del festival Cinema Planeta está dedicada a su memoria y legado, y nos recuerda que el trabajo para salvar a nuestro planeta y a nuestra especie continúa.


El festival Cinema Planeta inició el 22 de abril, en el marco del 50º aniversario del Día de la Tierra, y concluirá el 5 de junio, Día Internacional del Medio Ambiente, por lo que aún quedan algunos días para disfrutar de la excelente selección de películas. El registro es sencillo y automático, no lleva más de tres minutos llenar el formulario para comenzar a ver buen cine.


Cinema Planeta (cinemedios.com)


En las entrañas del festival Cinema Planeta


Once cortometrajes internacionales y 18 nacionales, 17 largometrajes internacionales y 11 largometrajes nacionales componen la selección del festival. Entre los filmes de poca duración destacan ocho cortos animados de muy buena factura, entre ellos Bene’s Horizon y Äni, muy recomendables para ver y comentar con niñas y niños.


Igualmente, para presenciar en familia, son altamente recomendables 7 gramos, La Laguna y El Manzano Azul. Esta última narra la historia de Diego, un niñito de 11 años que va a vivir a la montaña con su abuelo Francisco, a quien no conocía. Acostumbrado al confort urbano, Diego recibe de su abuelo el conocimiento para observar las cosas importantes de la vida: el trabajo, la solidaridad, el respeto por uno y por los otros. Una película para conmoverse.


En esta edición, Cinema Planeta presenta cinco largometrajes del director francés Yann Arthus-Bertrand: Home (2009), Planeta Océano (2012), La sed del mundo (guion, 2012), Nuestro Mar Mediterráneo (2014) y Terra (2015). Con imágenes poderosísimas, sus documentales nos descubren los lugares más impresionantes de nuestro planeta y nos brindan una perspectiva adecuada para compararnos con nuestro planeta, una perspectiva de largo aliento donde podemos reconocer nuestra nimiedad frente a la Tierra, pero también nuestra perniciosa influencia.


En Home, Arthus-Bertrand nos hace comprender que somos herederos de un milagro único en el universo, gracias al cual la Tierra adquirió las características que le permiten albergar la vida. La narración de Home comienza con las primitivas células eucariotas y nos da cuenta de cómo los seres vivos han existido y muerto por miles de millones de años, fijando el carbono de la atmósfera en el subsuelo, lo cual propició mejores condiciones para la vida y favoreció al fino trabajo en el que cada uno tiene su lugar para mantener al conjunto.


En este filme, el cineasta francés nos muestra la forma en que hemos explotado el esfuerzo colectivo de miles de millones de años y lo quemamos en cuestión de minutos en nuestros automóviles, o lo reventamos con dinamita y hasta incendiamos frágiles bosques para pastar animales. Arthus-Bertrand incluso retrata cómo el carbono se libera nuevamente a la atmósfera, modificando radicalmente las condiciones de vida y retrocediendo aceleradamente el largo trabajo de un planeta prácticamente irrepetible en el universo. No me es posible dejar de señalar la consternación que me produjo ver Planeta Océano y Home, que, a ocho y once años de ser producidas, plantean un panorama aterrador y un mensaje claro: nos estamos quedando sin tiempo para actuar.


Yann Arthus-Bertrand (2009), Home [Póster]


Cinema Planeta y sus linderos


En algún momento del documental In the same boat (2016), se nos plantea la misma pregunta arrojada por el científico Andrew McAffe: ¿Cuáles han sido los desarrollos más importantes en la historia de la humanidad? La película argumenta que este es un debate sin fin debido a la diversidad de logros filosóficos, políticos o científicos que la humanidad ha tenido, pero señala que la máquina de vapor es quizás el elemento de nuestra historia que más radicalmente nos ha transformado.


Para ilustrar este argumento, Yann Arthus-Bertrand hace referencia a las películas de Georges Méliès de finales del siglo XIX y principios del XX, las cuales relatan viejas leyendas, cuentos fantásticos de mundos lejanos y asombrosos, y que retratan el espíritu del Homo sapiens por querer llegar más lejos, conocer más y crear las máquinas más impactantes que la ciencia permitía en ese entonces. Quizás involuntariamente, o quizás para reflejar el carácter científico-narrativo con el que nació el cine, Arthus-Bertrand citó aquellas fabulosas películas.


Cabe señalar que In the same boat también aporta algunas ideas para reducir la desigualdad que ha alimentado la explotación salvaje e insostenible de nuestros recursos. Acorde con esta temática, el festival Cinema Planeta abunda en películas como Reverdecer, Todo el Tiempo del Mundo o Bike vs Cars, mismas que nos pueden inspirar a organizarnos con los vecinos y a vivir una vida más sencilla, alejada del tiempo acelerado de las grandes ciudades; inclusive nos inspiran a modificar nuestros hábitos de movilidad y luchar contra el cambio climático con las únicas cadenas que nos dan libertad: las de la bicicleta.


Después del festival


En 1987 la Comisión Mundial para el Medio Ambiente y el Desarrollo de la ONU hizo un fuerte llamado a las naciones para que reconocieran que «los retos van allende las divisiones de la soberanía nacional, de las estrategias limitadas para conseguir ganancias económicas y de las separadas disciplinas de la ciencia». Hoy la colaboración entre gobiernos nacionales y entre ciencias sigue siendo insuficiente: ¿cuánto tiempo menos tenemos?


Quizás el cine sea la única forma que tengamos para observar animales, plantas, montañas o mares de los lugares más remotos del planeta, no tanto porque no podamos viajar, sino porque quizás esa geografía o esos seres vivos ya no existen. Quizás el cine se convierta en una ventana para conocer lo que hemos tenido y hemos dejado perder.

Lo cierto es que el séptimo arte debería incluirse en la discusión de los mayores desarrollos de la humanidad, pues es muy posible que éste pueda jugar un papel mucho más activo en la lucha contra el cambio climático. Quizás ya sean muchos «quizás» y debamos fijarnos en lo que podemos hacer hoy; un primer paso es definitivamente ver una buena película en un festival como este, conocer la distopía que estamos viviendo y luchar por una nueva utopía.


Yann Arthus-Bertrand (2009), Home [Fotografía]


*Moisés Quiroz es historiador y planeador urbano. Disfruta de las bellas artes de la humanidad y le encanta platicar con quien se deje. Twitter: @MoosMx


123 views

Related Posts

See All

Comments


bottom of page